ENTRADA DEL 14/2/2025

Sigo con mi primer encuentro con mi “Gatito”, aunque todavía no le había bautizado así. Tras dormir juntos, nos despertamos casi a las 7 de la tarde. Respondí a las múltiples llamadas que tenía de Nuri y le dije que no iba a salir, que estaba con Aitor en su casa. Ella se alegró mucho, ya que Aitor era un buen tío y me puso en la pista, ya que me dijo que era muy compatible conmigo y mis calenturas... Debo decir que con Nuri tengo mucha confianza y ya sabía lo que me mola el tema del femdom.

 

El caso es que me follamos de nuevo, tomé la iniciativa, me eché sobre él... recuerdo que le mojé la pierna con mi coño que estaba chorreando y tras ponerle un condón, volví a montarlo como una amazona. El se dejó cabalgar... me decía “me encanta, me encanta” y qué decir yo... juro que notaba su polla... es raro, pero es como si me llegara super dentro, era raro pero me ponía loca total ¿del coño? Ja, ja, ja...

 

Así seguimos toda la tarde, pero más aún... me quería comer el coño y me decía que estaba supersabrosa. Me corrí no sé ni cuantas veces. Para cenar pedimos comida china y de nuevo pude comprobar que era un tío bastante interesante, de esos que por falta de capacidad o por mala suerte, me resultaba imposible encontrar. Con posibilidad de hablar temas interesantes, incluso de política... y muy puesto en feminismo.

 

Diosss... si, lo hicimos un par de veces sin condón, aunque una de ellas, me echó la leche sobre el vientre, que luego me repartí como crema y le pedí que me lamiera después... se limitó a arrugar el entrecejo PERO LO HIZOOOO!!!!!!.

 

Al día siguiente domingo, desayunamos en un bar de las cercanías. ¡Ooooohhh nuestra primera discusión....! Él es superfitness, se pidió un sandwich vegetal incluso sin mayonesa y yo unos torreznos y una ración de tortilla de patata. Claro, me miraba, porque soy flaca y luego miraba mi desayuno y alucinaba y me reprochó que comiera eso a la mañana. Me acuerdo de su expresión entre asombrada y horrorizada, y le dije que follar me da hambre... y además me había tomado una pastilla del día después por si acaso por la cagada del calentón. Siempre llevo alguna en el bolso por si las moscas. Y me decía que eso era insano, pero bueno, yo siempre he tenido un metabolismo muy acelerado y no soy como muchas tías, que se reprimen comiendo.

 

Nos besamos y mucho, parecíamos una parejita muy mona. A ver, no voy a hacerme la tonta; sé que estoy buena, aunque la verdad es que tengo las tetas pequeñas. Para empezar, mi primer trabajo en Cuenca, fue en una tienda de maoda en la que me cogieron precisamente por estar buena, no tenía ni puta idea de tratr con clientes ni nada, pero el dueño de la tienda tuvo que pasar la fregona por las babas que echó al hablar conmigo. Y Aitor, también es bastante guapo y aparente, por lo que bueno, éramos monos... más allá de las esencias que existían también. Me sorprendió también de él, que leía bastante, algo que suele ser bastante raro entre los tíos... pero bueno, sin más.

 

Tras un último polvo a la hora de comer, me devolvió a Cuenca y quedamos en que volveríamos a vernos. Ah,si, usé condón.

 

REFLEXIÓN: Llevaba una temporada muy bollera, me había enrollado sólo con tías, ya que estaba ya bastante hasta el coño de tonterías de tíos machitos gilipollas. Estar buena, hace que tíos que van de buenorros pero que no son nada más que tabletas de chocolate y tonterías en la cabeza me entraban y hay muchos tíos seguro que más interesantes, me ven como la típica buenorra que pasaría de ellos, lo que es un bucle de gilipollez- Aitor me hizo recuperar la fe en los tíos. Miento, me hizo recuperar la fe en él.